El mundo digital se une con el mundo físico para transformar los procesos industriales tradicionales y mejorar la productividad, convirtiendo a las empresas en espacios de trabajo inteligentes y con un alto nivel de competitividad.
Estas tecnologías no sólo están orientadas al marketing, a la formación o los videojuegos, también se pueden aplicar en sectores como el transporte o la logística con el fin de aumentar la productividad, reducir costes y diferenciarse de la competencia.
Las principales ventajas del uso de estas tecnologías son: optimizar los procesos existentes para mejorar en eficiencia y ampliar sus capacidades para transformar los modelos de negocio hacia nuevas fuentes de ingresos.





